¿Qué es bueno para subir la presión? Ya que siempre estoy en 60

Introducción: ¿Por qué debes preocuparte por la presión baja?

Tener una presión arterial baja, también conocida como hipotensión, no siempre es un problema grave. Sin embargo, cuando los niveles descienden excesivamente o de forma frecuente, pueden causar síntomas incómodos o incluso peligrosos como mareos, desmayos, visión borrosa, fatiga y confusión.

Una presión sistólica de 60 mm Hg se considera muy baja, especialmente si se acompaña de síntomas. Si este es tu caso, es importante que sepas qué acciones tomar, qué alimentos consumir y qué hábitos cambiar para subir tu presión de manera natural.

En este artículo te explicamos:

• Cuáles son las causas más comunes de la presión baja

• Qué comer o tomar para estabilizarla

• Remedios caseros recomendados

• Cuándo debes consultar a un médico

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¿Qué es la presión arterial y cuáles son los niveles normales?

La presión arterial mide la fuerza con la que la sangre empuja contra las paredes de tus arterias mientras el corazón late y en reposo. Se expresan en dos cifras:

• Presión sistólica (cuando el corazón se contrae)

• Presión diastólica (cuando el corazón se relaja)

Los niveles considerados normales son:

Nivel	Sistólica (mm Hg)	Diastólica (mm Hg)
Normal	120	80
Baja	Menos de 90	Menos de 60

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Causas comunes de una presión en 60 mm Hg

• Deshidratación

• Anemia

• Falta de sal

• Hipotiroidismo

• Problemas cardíacos

• Uso de medicamentos como antihipertensivos o antidepresivos

• Ayunos prolongados

• Estrés o ansiedad

• Problemas hormonales o desequilibrios electrolíticos

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¿Qué puedes hacer para subir tu presión de forma natural?

H2: Cambios inmediatos para sentir alivio

H3: 1. Toma agua con sal (pero con precaución)

Una pizca de sal en un vaso con agua puede ayudar a elevar tu presión momentáneamente, ya que la sal retiene líquidos y aumenta el volumen sanguíneo. No se recomienda si tienes problemas renales o cardíacos.

H3: 2. Eleva las piernas por encima del corazón

Al acostarte con las piernas elevadas, facilitas que la sangre fluya de regreso al cerebro y corazón, ayudando a estabilizar la presión rápidamente.

H3: 3. Come algo dulce o con carbohidratos

Un trozo de pan integral, un plátano o incluso una cucharadita de miel pueden ser suficientes para darle un impulso a tu presión.

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H2: Cambios a mediano y largo plazo

H3: 4. Aumenta tu consumo de sodio de forma controlada

Incorpora alimentos como:

• Quesos curados

• Aceitunas

• Sopas

• Embutidos (con moderación)

H3: 5. Hidratación constante

Beber al menos 2 litros de agua al día ayuda a evitar bajones de presión, sobre todo en climas calurosos o si haces ejercicio.

H3: 6. Come varias veces al día

Realiza de 5 a 6 comidas pequeñas durante el día para evitar hipoglucemias o vacíos energéticos que afecten tu presión.

H3: 7. Evita levantarte bruscamente

Al cambiar de posición (de acostado a parado), hazlo lentamente para que tu cuerpo tenga tiempo de ajustarse.

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Remedios caseros eficaces para subir la presión

• Infusión de romero: Mejora la circulación y estimula el sistema nervioso.

• Té de jengibre con miel: Aporta energía y mejora la presión de forma suave.

• Batido de plátano con leche y avena: Fuente rica en potasio, ideal para regular la presión.

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¿Cuándo debes preocuparte?

Si tu presión arterial sistólica está constantemente en 60 mm Hg o menos, y además tienes síntomas como:

• Mareos frecuentes

• Pérdida de conciencia

• Visión borrosa

• Palpitaciones o dolor en el pecho

👉 Consulta a un médico inmediatamente. Puede haber una condición subyacente más grave que requiere tratamiento.

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¿Debo automedicarme?

No. Muchos medicamentos para la presión baja pueden tener efectos secundarios. Solo un profesional puede determinar si necesitas medicación, estudios adicionales o una dieta personalizada.

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Conclusión

Tener la presión en 60 no es algo que deba tomarse a la ligera. Si bien puedes actuar en casa con medidas sencillas, es clave detectar por qué te sucede, y hacer cambios de fondo para evitar riesgos a futuro.

✅ Hidrátate, aliméntate bien, escucha tu cuerpo y no dudes en buscar ayuda profesional si los síntomas persisten.